En sus primeros días de gestión, el nuevo
gobierno de Macri y los CEO, lanzó una serie de medidas económicas, todas ellas
destinadas para beneficio de los empresarios. Comenzando por la reducción o
eliminación de las retenciones, liberando las importaciones, y finalmente,
levantando el cepo al dólar, que trajo una devaluación de un 40 % del peso.
También se adelantó que desde enero se reducen los subsidios y habrá un
"ajuste" de tarifas, en otras palabras, un tarifazo.
Este ajuste no viene solo, está acompañado
de despidos. Los compañeros de Cresta Roja siguen reclamando sus puestos de
trabajo, en un conflicto que no tuvo solución con el gobierno anterior, y no
parece tenerlo por ahora con el nuevo. Como los tercerizados del Subte, que ya
van por el segundo corte de vías, ante la falta de respuestas a los despidos.
En Siderca-Tenaris se logró la reincorporación de 189 despedidos, pero a cambio
del chantaje de firmar un consentimiento de trasladarse a un sector especial de
“servicios generales” con la consecuente pérdida de adicionales, lo que
rebajaría el salario al 60 %, y permanecen suspendidos hasta el 9 de enero.
Como si esto fuera poco, Macri pretende
imponer un “protocolo de protesta social”, dando una muestra de que su política
será la represión frente a las crecientes luchas obreras y populares contra el
ajuste.
Por el momento, tanto Caló, Moyano y Yasky
denuncian el ajuste en curso, pero no pasan de las declaraciones.
Telefónicos: no podemos esperar hasta
julio
En nuestro gremio vimos los primeros síntomas
del envalentonamiento de las empresas. Telefónica vende una parte de TGestiona,
intentando avanzar una vez más en la tercerización de distintos sectores. Los
compañeros lo enfrentaron, tomando el edificio Iguazú, acompañados de delegados
de distintas oficinas. Finalmente, Telefónica firmó un acuerdo con FOETRA,
donde se compromete a garantizar la estabilidad laboral y la representación
sindical de los compañeros. Por su parte, la Mesa de Unidad Sindical, de la que
es parte FOETRA, resolvió (sin consulta al conjunto de los telefónicos)
reclamarle a las empresas un bono de "fin de año" de $6.000 de
bolsillo, a cobrar en... febrero. Raro calendario el de las direcciones
sindicales.
Desde la Agrupación Violeta, venimos
planteando que necesitamos un bono, que sea realmente de fin de año, en el
camino de pelear por la reapertura de paritarias. No podemos esperar hasta
julio, cuando en el último mes, antes de la devaluación, hay productos que ya
subieron un 30 %. Peor aún es la situación de nuestros compañeros tercerizados,
con salarios y convenios a la baja. Es necesario que se convoque a un plenario
de delegados con mandatos de las oficinas para consultar a todos los compañeros
qué importe de bono exigir, como parte de una reapertura de paritarias que incluya
la cláusula gatillo.
Por eso, vamos a ser parte de la
convocatoria de distintas
organizaciones sindicales, sociales y políticas, entre otras la CTA
Autónoma, el Frente de Izquierda, el Movimiento Evita, que este martes 22 van a
marchar contra el ajuste, denunciando la devaluación en curso y exigiendo un
bono de fin de año, para todos los trabajadores y jubilados. Creemos que FOETRA
debería ser convocante de esta primer medida en común con distintos sectores en
contra del ajuste. Llamamos a todos los telefónicos a impulsar y participar de
esta marcha, para dar una primera respuesta contundente contra los ataques que
se vienen. Los empresarios y el gobierno pretenden resolver su crisis
descargando el ajuste sobre los trabajadores. Somos nosotros los que podemos
frenarlo impulsando la mayor unidad del conjunto de los trabajadores en las
calles.
Martes 22 de diciembre, concentramos en
Belgrano y 9 de julio a las 16.30 h
AGRUPACION VIOLETA TELEFONICOS
20/12/15
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